Inspección del cuello
Para la examinacion del cuello se trazan líneas
imaginarias para buscar una mejor ubicación de las lesiones que puedan
presentar.
La descripción del cuello debe ser
detallada y completa. Se mencionan las características generales: si es simétrico
o asimétrico, central. En caso de que sea asimétrico se debe decir la causa, si
es móvil y los movimientos son normales, si hay torticolis. También se observa
la configuración del cuello normal o muy corto.
Observase la piel del cuello si esta
intacta o presenta lesiones como cicatrices, abscesos, ulceras. Se describe el
lugar donde se encuentran y el tamaño.
La palpación se lleva a cabo desde el frente o desde atrás del paciente, lo importante es que ambos lados deben ser palpados y comparados.
Venas yugulares.
Mencionar si están distendidas en forma
permanente o si hay ingurgitamiento venoso.
Arterias Carótidas.
En el caso de carótidas hay que inspeccionar, palpar y auscultar.
En la inspección podemos
notar si son tortuosas. A la palpación observamos las pulsaciones y si son normales,
aumentadas o disminuidas.
A la auscultación se
verifica la presencia o no de soplos, describiendo su intensidad suave, moderada,
intensa y su sincronicidad con el pulso. Su configuración tortuosidad,
aneurismas y si hay Thrill a la palpación.
Traquea.
Indicar su posición, ya que esta puede
estar desplazada hacia un lugar u otra por la presencia de un tumor esofágico o
bocio. Describir si hay
protusiones o pulsaciones palpables sincrónicas con el pulso. Debe palparse la
traquea con los dedos índice y pulgar para determinar su consistencia y para
detectar pulsaciones que se pudieran dar.
Auscultación.
Debe realizarse cuando se sospecha tumor
del cuerpo carotídeo, aneurismas vasculares, estenosis carotídea o bocio
hipertiroideo.
Ganglios linfáticos.
Debe ser descrito el tamaño de los ganglios linfáticos
del cuello, el tamaño normal de estos no permite que sean ni palpables ni mucho
menos visibles, pues son muy pequeños. Cuando se palpan o son visibles son
ganglios linfáticos patológicos, y se debe detallar: el número, si están
aislados o confluentes.
Otras características a observar son
consistencia blandos, duros o pétreos, localización en los diferentes ángulos y si presenta
dolor a la palpación.
La palpación de los ganglios se debe efectuar siguiendo este orden:
1.
Ganglios preauriculares.
2.
Ganglios retroauriculares.
3.
Ganglios occipitales.
4.
Ganglios submentonianos.
5.
Ganglios submaxilares.
6.
Ganglios cervicales anteriores.
7.
Ganglios cervicales posteriores.
8.
Cadena cervical profunda.
9.
Ganglios supraclaviculares.
Lesiones del cuello.
Torticolis
La torrticolis es un tipo de distonia que se define como las contracciones
musculares prolongadas, en que los músculos del cuello, particularmente el músculos esternocleidomastoideo, se contraen involuntariamente y hacen que se
incline la cabeza.
Esta puede
ser congénita o adquirida. Provoca rigidez del cuello y limitaciones en los
movimientos del mismo.
Glandula tiroides
La glándula tiroides ocupa la región
anterior del cuello, estando situada por delante de la tráquea, del cartílago
cricoides y parte inferior del cartílago tiroides; sus lóbulos laterales
(derecho e izquierdo) miden alrededor de 5 cm de largo y 3 cm de espesor, son
irregulares y de forma cónica. La porción lateral de cada lóbulo está cubierta
por el músculo esternocleidomastoideo.
Al momento de su exploración se debe mencionar si es
visible o si se palpa. No se escribe "tiroides normal", porque no se
sabe, puede que no la tenga –resección quirúrgica, atrofia, agenesia-.
Para la exploracion del tiroides el paciente sentado en
una posición cómoda, palpar con los
dedos índice y pulgar a un lado y al otro. Luego de pie detrás del paciente,
utilizando los dedos medio y anular en la línea media de los dos lados, para
mejores resultados este se debe explorar estática y durante la deglución, la cabeza del
paciente de esta en hiperextencion a la misma vez girarla a ambos lados. La palpación
bimanual desde atrás, colocando la punta de los dedos en la línea media para
palpar sus lóbulos.
Las características a observar en la
inspección de la tiroides son:
·
Crecimiento: este
puede ser nodular o difuso, uninodular y multinodular.
·
Tamaño:
pequeño (se palpa no visible), moderado (se mira), grande, gigante. La glándula
tiroides puede estar aumentada de tamaño en forma difusa como ocurre en la
tiroiditis y en el bocio simple; en otras circunstancias, el aumento de tamaño
es localizado, y así se observa en el bocio nodular y en otros tumores de la
glándula.
·
Consistencia: puede ser blanda, firme, dura, pétrea o
renitente.
·
Movimiento: fija,
móvil, desplaza con la deglución.
·
Superficie: lisa, rugosa.
·
Sensibilidad:
dolorosa a la palpación, calor,
eritema local.
En la auscultación se puede escuchar thrill o soplos,
sobretodo es sospecha de hipertiroidismo.
Hipertiroidismo
Es un tipo
de tirotoxicosis caracterizado por un trastorno metabólico en el que el exceso de
función de la glándulas tiroides que conlleva una
hipersecreción de hormonas tiroideas (tiroxina (T4) libre o de triyodotironina (T3) libre, o ambas) y niveles plasmáticos
anormalmente elevados de dichas hormonas.
Síntomas
Síntomas
los síntomas que presentan son taquicardia, perdida de peso, neviosismo y temblores.
El diagnóstico y
tratamiento adecuado del hipertiroidismo depende del reconocimiento de los
signos y síntomas de la enfermedad y la determinación de la etiología.
Hipotiroidismo
Es la disminución de los
niveles de hormonas tiroideas en el plasma sanguíneo y
consecuentemente en el cuerpo, que puede ser asintomática u ocasionar múltiples
síntomas y signos de diversa intensidad en todo el organismo. Los pacientes en ocasiones pueden recibir tratamiento psiquiátrico o psicológico
cuando en realidad lo que necesitan es tratamiento hormonal sustitutorio. No es
fácil de diagnosticar en sus estados iniciales.
El hipotiroidismo congénito es aquel de origen genético que
aparece en el momento del nacimiento del bebé. Es importante su detección
precoz mediante análisis clínicos pues los niños pueden no presentar signo
aparente tras el nacimiento. Las hormonas tiroideas son necesarias para el
normal desarrollo del crecimiento y de importantes órganos como el cerebro, el
corazón y el aparato respiratorio. Si no se trata adecuadamente de forma precoz
puede provocar discapacidad física y mental.